Nuestros héroes se levantan luego de una alborotada noche en la posada recomendada por Maccath y al fin luego de tantos problemas los aventureros regresarían a Waterdeep e informarían a la alianza de los resultados de sus misiones, sin embargo, al llegar al barco de Lerustah un gran rayo chocó con el mástil del barco destruyendo las velas y parte de la base. Lerustah y sus hombres salieron como si un demonio los estuviera persiguiendo, mientras en la parte baja del muelle, varios cultistas vestidos con sus características armaduras de escamas de dragón asediaron a los aventureros, su líder un imponente semi-dragón azul cargó contra ellos mientras rugía: -¡Mueran malditos! yo Deepwrath vengaré la muerte de mi hermano Cyanwrath-
El ataque del culto del dragón comenzó con furia, hiriendo de gravedad a Kratos y Halberin, los hombres de Deepwrath no eran como los garradragón que el grupo se había enfrentado antes, estos poderosos guerreros podían volar mientras lanzaban rayos de orbes que sostenían en sus manos y Deepwrath controlaba eficazmente la situación enviando solo los soldados rasos para evitar que el grupo se acercara a él.
Moira viendo el problema en el que estaban todos, quedo en completo trance mientras sus ojos se oscurecían por completo, en ese instante una voz salió de los labios de la tiefling, pero no era la voz de la joven, era una voz mucho más profunda y criptica que nadie entendía, de repente una oscuridad profunda salió del lugar en el que estaba Deepwrath y sus hombres y tentáculos oscuros apresaban a los oponentes debilitándolos en gran forma mientras Moira sonreía con una malicia inimaginable.
Un dragón azul que se encontraba como parte del equipo de asalto de los cultistas lanzó su arma de aliento realizando un gran daño tanto a Cordelia como a Moira quienes cayeron inconscientes al instante desvaneciendo el horrible conjuro de la tiefling. Escanor levantó a Hazirawn y un aura de curación emanó del paladín salvando a Moira y a Cordelia de una muerte segura. Frigga por su parte lanzó sus mejores flechas en contra del poderoso dragón, era una batalla reñida hasta que en medio de la batalla Deepwrath alzó su mano: -Culto del dragón, bajen sus armas, estos aventureros han demostrado que no son nada débiles, así que hablaré con ellos para que se nos unan al culto-
Los hombres sobrevivientes y el dragón azul totalmente desconcertados hicieron caso, preguntándose el cambio repentino de actitud de Deepwrath al igual que nuestros héroes, pero todo se aclaró cuando detrás de nuestros guerreros Moira levantándose del suelo había controlado mentalmente a Deepwrath. La bruja doblegando la mente de Deepwrath solicitó toda la información que poseía el semidragón enterándose de la ubicación tanto del cuerno del dragón como de las máscaras, un lugar conocido como el pozo de dragones.
Una vez el hechizo se deshizo Deepwrath ordenó nuevamente el ataque, Moira intentó frenar la segunda oleada de sangre amenazando con matar a Deepwrath, pero los cultistas dijeron: - Si fue tan débil como para dejarse controlar por ustedes, solo merece la muerte – Escanor entonces decapitó a Deepwrath, mientras Merik oculto como siempre, proporcionó los golpes finales a los sobrevivientes heridos, por su parte Misty y Kratos terminaban con los más fuertes y Halberin regresaba a proporcionarle curación a la gnomo caída. Moira y Frigga lanzaron sus ataques a distancia al dragón quien viéndose solo en contra de los guerreros huyó del lugar, no sin antes exclamar en la distancia:
- ¡Los dragones nos alzaremos! ¡No podrán detener al culto del dragón! –
Luego de la gran batalla el grupo revisó con Lerustah el estado del barco, el cambio del mástil y las velas proporcionaba quedarse unos cinco días en Luskan, el grupo entonces tuvo que regresar a la torre de la hermandad arcana quienes, luego de los hechos comentados levantaron defensas mágicas para que no hubiera un nuevo ataque.
Pasaron los días en la posada de las siete velas de Luskan hasta que el día de partir llegó, la hechicera Maccath se encontró con los aventureros como emisaria de los magos de la hermandad quienes decidieron apoyar a la alianza para acabar con este culto, el grupo con la nueva compañía regresó a Waterdeep para emitir su informe. Llegando a la ciudad el grupo fue abordado nuevamente por Leosin quien feliz de ver a los guerreros informó de las noticias recientes de la alianza. En primer lugar les informa que Lady Laeral Silverhand es la nueva señora de Waterdeep sustituyendo a Lord Neverember, sin tiempo que perder Moira se despidió de Leosin, pues ella quería investigar a Laeral pues la consideraba muy sospechosa y posible aliada del culto. Leosin también informó de la convocatoria a un segundo concilio pues había llegado una gran emisaria de nombre Elia, Escanor agradeció por la información del monje semielfo y quiso dirigirse hacia esta nueva persona, Leosin le explicó al paladín que Elia se encontraba con Lord Neverember.
Por su parte Moira disfrazada en su forma de Sasha visitó a Lady Laeral a quien no pudo sacar información importante debido a los recientes conflictos políticos dejados por Lord Neverember, Escanor visitó a Lord Neverember quien estaba con una mujer hermosa de cabellos plateados, quien no era otra que Elia, Escanor presentó humildemente a su esposa y su grupo, a quien la mujer respondió afectivamente, aunque Frigga logró notar una mirada despectiva hacia Halberin, la mujer dijo ser una emisaria de los dragones metálicos quienes se mostraban preocupados por el conflicto con el culto. Con estos aliados inesperados los aventureros renovaron sus esperanzas.
A la mañana siguiente el grupo fue reunido para el segundo concilio, los aventureros fueron vestidos con excelentes ropas para ver nuevamente a los señores de la Costa de la Espada, una vez en el segundo concilio Lady Silverhand los saludó respetuosamente mientras miraba a Moira con intriga. La señora de Waterdeep entonces habló directamente con Moira en su cabeza, preguntándole a la bruja por qué la ha estado investigando, Moira sorprendida por el poder de la aristócrata argumentó su desconfianza en contra de la mujer con el hecho de ser maltratados por los señores de la alianza. Laeral prometió a la tiefling un trato más justo en este concilio, a cambio que dejar la desconfianza en contra de ella, Moira viendo que el trato de la mujer era mucho más amable decidió confiar.
En este concilio se expusieron los eventos de la captura de Varram a los que los señores aplaudieron a excepción del enclave esmeralda quien argumentó que dejar con vida al susurrador de dragones supondría un posible rescate por parte del culto del dragón lo cual podría afectar el equilibrio de las cosas. Connerad con una actitud mejor que la del anterior concilio propuso enviar al enano a su reino en Mithral Hall para que sea justiciado por su propia raza.
Por otra parte se explicó los eventos del mar de hielo donde se alabó el hecho de haber derrotado a la antigua muerte blanca, generando un gran cambio de actitud en varias facciones, aunque Ontharr Frume vio con malos ojos el hecho que la hermandad arcana, una orden reconocida de hechiceros malignos que solo buscan el poder, se uniera a la alianza.
Maccath quien también se encontraba en la reunión habló en nombre de la hermandad y explicó que el hecho estaba afectando todo el mundo y por lo tanto los magos estaban dispuestos a acabar con este problema, a continuación transmitió sus conocimientos respecto al poderoso cuerno del dragón, a lo que todos se encontraban intrigados por las propiedades del artefacto, en especial la emisaria Elia.
Terminando el concilio el grupo fue abordado por Delaan del enclave esmeralda quien pidió al grupo de dirigirse al bosque brumoso hogar de Frigga y ayudar en contra de los ataques de los dragones que asolaban esa región aunque el rey Melandragrah señor de esas tierras discrepó con Delaan acerca de esa solicitud. Frigga quedó un poco desconcertada por la actitud de su rey y quiso ir de igual forma a su región, pero una invitación emitida por Elia y los dragones metálicos hacia los señores de la Costa de la Espada cambió el panorama nuevamente, la alianza esperanzada por la ayuda de los dragones del bien, decidió que el grupo se dirigiera inmediatamente con Elia a la reunión propuesta.
Luego del concilio los aventureros se reunieron en la torre más alta de Waterdeep en donde Elia los esperaba, allí la mujer se transformó ante ellos en una dragona de plata quien les dijo: - Aventureros mi nombre es Otaaryliakkarnos señora de plata y ahora les pido que se suban a mi lomo para ir con mis congéneres a las montañas Nether, el objetivo es que puedan convencer a mis compañeros para que se unan a las filas en contra de este culto ya que Tiamat no puede ser traída a estas tierras -.
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